Fue uno de los mejores jugadores que el fútbol tuvo, aunque no corrió con la misma suerte al comandar su país.
Ser el primer africano en ganar el Balón de Oro marcó un antes y después en la vida de George Weah, que lo colocó como el Mejor Jugador del Mundo del fútbol. Este galardón llegó en 1995, luego de un soberbia temporada a nivel colectivo e individual.
Sin embargo, el exatacante, que colgó los botines en 2003, tomó esta distinción como un salto al poder: tiempo después se convirtió en presidente de su país, Liberia.
George Weah y su paso por el fútbol
George Weah
Weah fue elegido presidente de Liberia en el 2017.
Weah comenzó su carrera en Liberia antes de dar el salto al fútbol europeo, donde rápidamente se convirtió en uno de los mejores jugadores del planeta. Es que su técnica y capacidad goleadora le abrieron camino en los mejores equipo del viejo continente.
Su paso por clubes importantes como el Paris Saint-Germain y el Milan lo catapultó a la élite del fútbol mundial durante la década de los 90. Su talento y personalidad, además, poco a poco lo llevaron a ser un símbolo único en su país.
Pero el momento más importante de su trayectoria llegó en 1995, cuando se adueñó del Balón de Oro, un premio que obtuvo siendo jugador del PSG y tras ganar la Copa de Francia.
Su vida después del retiro
Tras retirarse, Weah aprovechó su popularidad para iniciar una carrera política en Liberia. Después de dos intentos fallidos, fue elegido senador en 2014 y luego, en 2017, ganó la presidencia con más del 60% de los votos.
Su gobierno se centró en combatir la pobreza y el desempleo, aunque fue muy criticado por su falta de experiencia. Durante su mandato, Liberia atravesó dificultades económicas y denuncias de corrupción, lo que provocó su caída en las elecciones de 2023.
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